Tensión en Yucatán: Lanzan botella a AMLO durante su visita
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), vivió un tenso momento durante su reciente visita a Yucatán. En medio de su gira por el sureste del país, que incluyó paradas en Veracruz, Quintana Roo y Chichén Itzá, fue recibido con protestas y gritos de «¡Dictador!». Lo más sorprendente fue que una botella de vidrio fue lanzada hacia él, lo que generó gran conmoción entre los asistentes y en las redes sociales.
Un recibimiento dividido: gritos y apoyo para AMLO
Los gritos de «¡Dictador!» predominan
A pesar de que Andrés Manuel López Obrador es una figura polarizante en la política mexicana, pocas veces ha enfrentado actos de hostilidad tan visibles como los ocurridos en Yucatán. Al bajar de su camioneta en la ciudad de Veracruz, fue recibido por un grupo de manifestantes que, entre consignas y gritos, lo llamaron «dictador» repetidamente. Estos trabajadores del Poder Judicial manifestaban su inconformidad con las recientes reformas impulsadas por el mandatario, las cuales han afectado algunos sectores gubernamentales.
Aunque algunos de los presentes también corearon frases de apoyo, el clima general de la protesta era claramente de rechazo hacia el presidente.
Trabajadores del Poder Judicial en Veracruz recibieron al presidente López Obrador lanzándole una botella de agua y gritando consignas como "¡Yunes traidor, te vendiste al dictador!" y “¡Dictador! ¡Dictador!”.
— Azucena Uresti (@azucenau) September 22, 2024
Vía @Juan_OrtizMX pic.twitter.com/68E68orQnc
Lanzan botella de vidrio a AMLO durante la protesta
Uno de los momentos más comentados de la jornada fue cuando una botella de vidrio fue lanzada hacia AMLO. El objeto, arrojado desde la multitud, estuvo a punto de impactar al presidente, quien logró evadirlo con un rápido movimiento. El hecho fue capturado en vídeo y rápidamente circuló en redes sociales, provocando una ola de reacciones.
«Yunes traidor, te vendiste al dictador», fue otra de las consignas lanzadas por los manifestantes, en referencia a un antiguo gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, conocido por su rivalidad con el mandatario. La hostilidad del evento dejó una sensación amarga sobre la seguridad presidencial y el ambiente político en el sureste mexicano.
El Tren Maya y la visita a Yucatán, Proyectos clave en la región
A pesar de las tensiones, el motivo principal de la visita de López Obrador a Yucatán fue la supervisión de proyectos clave en la región. Durante su gira, AMLO abordó el Tren Maya, una de las obras insignia de su gobierno, para verificar los avances del proyecto y dirigirse a Chichén Itzá, donde inauguró un hotel y una estación ferroviaria vinculada a este ambicioso proyecto de infraestructura.
El Tren Maya, que ha sido objeto de críticas tanto por cuestiones ambientales como por el manejo de los recursos públicos, sigue siendo uno de los legados que López Obrador espera dejar al país. Su visita a la zona arqueológica de Chichén Itzá fue presentada como una oportunidad para promover el turismo y el desarrollo económico en la región sureste.
Un balance de la gira de AMLO en el sureste
La gira del presidente AMLO por el sureste de México ha mostrado una vez más la división que su figura genera en el país. Mientras algunos lo ven como un líder que ha traído cambios importantes y ha impulsado grandes proyectos de infraestructura, como el Tren Maya, otros lo critican por su estilo de gobernar, al que califican de autoritario.
El lanzamiento de una botella hacia el mandatario ha subrayado los riesgos y tensiones que enfrenta en su última etapa como presidente, en un contexto político cada vez más polarizado. Este incidente refleja no solo la incomodidad de algunos sectores ante su mandato, sino también el ambiente tenso que persiste en ciertas regiones del país.
La visita de Andrés Manuel López Obrador a Yucatán dejó un sabor amargo debido al mal recibimiento y al ataque con una botella de vidrio que casi lo impacta. Mientras el mandatario continúa con su gira y sus proyectos clave, como el Tren Maya, las tensiones políticas en el país siguen aumentando. Lo ocurrido en Veracruz es un recordatorio de la polarización existente en México y de los desafíos que enfrentará el país en los próximos meses, con el Mundial 2026 y las elecciones en el horizonte.